Luz de la noche

Es un sueño lo que tocas,
no te esfuerces en tocarlo más.
Si al fin tocases lo intocable
tu mundo sería de piedra,
una piedra más.
Si al fin no tocases
lo que tocarse pudiera,
serías aire y dicha
y eternidad.
La voz del sueño armaría un verso,
el espacio entero un poema
y todo el universo
la obra sin comienzo
que cantan los poetas.
Canta, canta a la noche,
pero no la toques,
que amanecerse pudiera
y el día igual viniere.
Canta, canta a la luz
y ve, sin mirar en ella,
lo que la luz,
de oscura y profunda,
esconde.

Comentarios

arianna ha dicho que…
Somos aire, dicha y eternidad

buenas noches
Maria Luisa ha dicho que…
Precioso... Namaste
Hola José Manuel,

Espero estés llevando bien el verano.

Gracias por tu sensibilidad

Un saludo,
Agustín.

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