El nirvana final (Despedida de Buda y Ananda)
Libre de las cadenas del tiempo diviso el horizonte del silencio, frente al vacío exploro mi conciencia detenida en la quietud de los abismos. Hay lágrimas de belleza en el interior de este alma agotada, en el espacio de los astros de luz, en el corazón de todas las cosas. Ananda llora mi partida como un niño asustado, quisiera decirle que me acompañe… pero es imposible. El camino final es de uno solo. -¿Hacia dónde vas ahora, después de tanto tiempo juntos? ¿Por qué me dejas? -Este es el momento de separarnos, mi querido Ananda. Pero antes quiero decirte algo, serán mis últimas palabras, mi última enseñanza. -¿Dime qué es? Te escucho atentamente. -Sé tu propia luz. Ananda supo en ese instante lo que yo pude entender a lo largo de muchos años de meditación y soledad. Ambos comprendimos, en el abrazo último, que volveríamos a encontrarnos próximamente, allí donde el tiempo no existe y la rueda deja de girar, para siempre.